La Organización Mundial de la Salud rechaza que el coronavirus haya sido creado en un laboratorio.
Aclara que el patógeno tiene origen animal y no proviene de un laboratorio al referirse a los múltiples datos falsos que han circulado desde el inicio de la crisis sanitaria.
Una vez más, la OMS precisa que el reservorio natural del virus SARS-CoV-2 eran los murciélagos y que de allí llegó a una especie “intermediaria” desde la que saltó al hombre.